El año 2026 se acerca, y con él llegan nuevos desafíos críticos de los que cualquier pyme mexicana debe estar consciente desde este momento para comenzar a pensar en las medidas que necesitará para manejarlos y superarlos.
Algunos de ellos son continuaciones de los retos principales que dejó 2025, pero otros son completamente novedosos, así que no basta con apoyarse en estrategias históricas para afrontarlos exitosamente, sino que es posible que nuevos enfoques sean necesarios.
Aquí te traemos una lista de los 8 más relevantes para todo el entorno empresarial, esto con el fin de darte la información fundamental que necesitas para tomar decisiones óptimas que guíen el camino de tu pyme en este nuevo contexto.
Falta de acceso a financiamiento
En 2025, la dificultad para acceder a financiación continuó siendo una de las principales causas detrás de la desaparición de pymes en el país, de acuerdo con El Economista.
Incluso si se estima que la disminución de tasas de interés bancarias podría hacer del crédito empresarial algo más accesible para muchas pymes el próximo año, con base en datos históricos que destacan a este desafío como algo recurrente año tras año, lo más probable es que la obtención de financiamiento siga siendo una barrera para muchos negocios.
Dado que el financiamiento es crucial para preservar estabilidad en momentos inciertos y contribuir a la superación de otro desafío crítico para empresas mexicanas: la falta de liquidez para operar, ahora es un buen momento para comenzar a explorar vías alternas de financiación con menores barreras de entrada y costos.
¿Cómo cuáles? El factoraje financiero puede ser una solución conveniente debido a sus menores requisitos mínimos de facturación y operación, así como a sus intereses a corto plazo que evitan los excesos de deuda, pero otros tipos de créditos de capital de trabajo a corto plazo también pueden ser relevantes.
Digitalización
De forma constante, aunque relativamente lenta, el número de pymes que aprovechan redes sociales, sistemas de cómputo, software especializado y otros recursos digitales va en aumento, algo muy positivo para que estas empresas crezcan en el contexto actual.
En este punto, a muchos líderes pyme les resulta claro lo importante que es dar este paso, pero, ahora, el desafío está en hacerlo efectivamente, eligiendo las herramientas adecuadas, aprendiendo a usarlas y monitoreando su implementación rentable.
Esto, pues, aunque el 94% de los emprendedores aprovechan la tecnología a un nivel básico, solo el 6% sabe cómo maximizar su potencial a un nivel avanzado.
Por sí sola, la digitalización trae beneficios importantes, pero depende de una cultura digital sólida, de capacidades técnicas suficientes y de un enfoque estratégico para que esta no sea un costo más, sino una inversión a futuro.
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Gestión de talento humano
Recientemente, las complicaciones en la digitalización han pasado a segundo plano como reto principal de las pymes en México, siendo reemplazadas por la gestión de recursos humanos en materia de importancia para líderes empresariales. De acuerdo con encuestas, esto es un reto crítico para el 62% de las pymes.
¿En qué consiste este desafío? En la dificultad para atraer y retener talento de calidad por medio de salarios tanto llamativos como rentables, capacitación que impulse su desarrollo profesional y una adecuación a las exigencias que nuevas generaciones de trabajadores, como la generación Z, tienen en torno a equilibrio personal y profesional.
Muchas veces, resulta cierto que a las pymes les resulta difícil competir en este rubro debido a recursos financieros limitados.
Sin embargo, la buena noticia es que cada vez más trabajadores priorizan un ambiente laboral sano y un balance laboral sobre otros beneficios, y aunque un salario suficiente es imprescindible, las pymes también pueden conseguir talento de calidad invirtiendo en estas áreas.
Compromiso con la sostenibilidad
La sostenibilidad ya no solo es una ventaja comercial frente a ciertas audiencias, sino una obligación empresarial, ya que en 2026 comenzará a ser un requisito básico la entrega del reporte de sostenibilidad anual, diseñado para crear transparencia y responsabilidad en torno a la forma en la que empresas que cotizan en bolsa gestionan su impacto ambiental.
Por supuesto, esto abarca a muchos corporativos y grandes empresas, pero también a varias pymes en crecimiento que comienzan a apalancarse con financiamiento mediante capital.
Lo más importante para afrontar este reto: tomar el tiempo para crear una política de sostenibilidad que defina responsables, controles para mantener niveles óptimos de cumplimiento en esta área y protocolos de acción.
Incertidumbre económica
A pesar de que, a nivel interno, factores macroeconómicos como la inflación se han mantenido relativamente bajos, México afronta incertidumbre económica en áreas como su relación comercial con Estados Unidos (marcada por tensiones arancelarias) y una desaceleración que podría extenderse a 2026.
Lo que estas condiciones presentan es un entorno difícil de predecir en el que varios efectos, tanto negativos como positivos, podrían materializarse, así que las pymes deben prepararse para manejarlos.
Para ello, el primer paso es contar con procesos adecuados de proyección financiera y previsiones comerciales que ayuden a anticipar ciertos cambios. Pero, dado que no hay forma de predecir estas nuevas circunstancias con total precisión, lo mejor es tomar una estrategia preventiva, mejorando el control sobre el flujo de efectivo, creando un fondo de reserva y diversificando ingresos, entre otras cosas.
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Gestión de datos e IA apropiada
Por sus aplicaciones en la analítica de datos, la inteligencia artificial se ha vuelto una herramienta cada vez más importante para empresas de todo tamaño y sector. No obstante, a pesar de una adopción en rápido crecimiento, solo el 10% de las organizaciones mexicanas ya ha generado valor por medio de esta tecnología.
Aquello que se interpone frente a los beneficios de esta tecnología son bajos presupuestos, insuficientes capacidades técnicas, expectativas poco realistas, una falta de un plan estratégico y, sobre todo, una cultura deficiente de datos, a partir de la cual la IA es incapaz de generar valor.
En efecto, un uso eficiente de IA requiere de una inversión, pero para afrontar el reto de esta tecnología y convertirlo en una oportunidad, lo más vital es entender lo que esta puede y no puede hacer y crear un plan de implementación según las posibilidades de cada pyme.
Contar con suficientes medidas de ciberseguridad
De acuerdo con un estudio de Kaspersky, hasta el 43% de las empresas mexicanas han sido afectadas por algún incidente relacionado con problemas en su ciberseguridad en los últimos dos años.
Esta cifra ha ido aumentando respecto a años anteriores, así que resulta lógico asumir que el número de incidentes seguirá incrementando en 2026 y años consiguientes, por lo que los problemas de ciberseguridad se posicionan como desafíos importantes para las pymes.
La superación de este desafío puede requerir de una infraestructura sólida de ciberseguridad, con certificaciones relevantes y tecnología preventiva, pero, en muchos casos, lo más vital es el entrenamiento en torno a la detección oportuna de ciberataques comunes, como el phishing, puesto que estos pueden ser perfectamente evitados con las nociones y conocimientos adecuados, sin una inversión excesiva de capital.
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Cambio en la demanda y comportamientos del consumidor
Finalmente, un desafío importante que continuará afectando a pymes en 2026 es la dificultad para anticipar los cambios en la demanda y comportamientos de consumo de su público objetivo, ya sea por las rápidas fluctuaciones en estas áreas o por una mala gestión de datos que no permite entender, verdaderamente, lo que un consumidor particular desea.
¿La mejor estrategia a implementar para este reto? Tomar en serio el análisis de clientes con un CRM y una buena gestión de datos es importante, pero también es buena idea implementar una estrategia de comunicación y retroalimentación abierta que ayude a conectar desde un lugar de verdadero interés o necesidad con clientes.
Para finalizar: a medida que 2026 se acerque todavía más y comience a evolucionar, nuevas tendencias y retos se harán más evidentes, pero estos 8 desafíos se pueden reconocer desde este instante, así que puedes comenzar a preparar a tu empresa para afrontarlos ahora mismo.
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