Algunos de los aliados más importantes que tendrás a lo largo del proceso de crear y hacer crecer a tu empresa, son tus proveedores. Mantener una buena relación con ellos es crucial para lograr el éxito de tu negocio, ya que te puede brindar ventajas en el manejo de costos, mejores beneficios precio-calidad y acceso a otros sectores del mercado.
Por esto, es importante que conozcas que existen múltiples clasificaciones de proveedores y que entiendas las particularidades de cada tipo para poder manejarlos de la forma correcta y tener acceso a los beneficios que eso conlleva.
Importancia de los proveedores en la cadena de suministro
El papel de los proveedores es fundamental en cualquier empresa debido a que ningún negocio es capaz de generar por sí solo todos los suministros o insumos que necesita para desarrollarse, por lo que siempre es necesario adquirir relaciones comerciales con otras organizaciones para el abastecimiento de materia prima. De esta forma, se genera una red que beneficia a todos los involucrados y brinda mayores oportunidades de crecimiento.
Los proveedores garantizan que tu empresa pueda sostener sus actividades cotidianas y permiten que puedas producir a tiempo todos los productos o servicios que vendes a tus consumidores. Cuando la relación con tus proveedores es mala o no sabes cómo gestionarla, tu empresa puede perder acceso a ventajas como las negociaciones para la reducción de costos, o puede verse obligada a trabajar con proveedores de mala calidad que pueden no ser confiables u ofrecer precios demasiado elevados.
Para eso, existen 4 formas distintas de clasificar a tus proveedores, estas se basan en el tipo de actividad y modelo de negocios, su ubicación geográfica, el tipo de productos que ofrecen y la temporalidad de su relación con tu empresa. Un único proveedor puede pertenecer a varias categorías, por lo que es importante que comprendas las características de cada una para tomar decisiones informadas sobre su gestión.
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Proveedores por tipo de actividad y modelo de negocios
En primer lugar, los proveedores se pueden clasificar por el tipo de suministros que ofrecen a tu empresa, existen 3 tipos:
- Proveedores de bienes terminados: son aquellos que proveen artículos que ya fueron procesados en su totalidad. Algunos se encargan de suministrar artículos necesarios para el funcionamiento de tu empresa (como artículos de oficina, computadoras, maquinaria, etc.) y otros ofrecen productos que puedes vender de nuevo a tus clientes.
- Proveedores de servicios: se encargan de ofrecer servicios, en lugar de productos. Estos pueden ser proveedores de software específicos, consultorías, etc.
- Proveedores de materias primas: son los más esenciales para empresas que comercializan artículos físicos, ya que proveen los materiales necesarios para producirlos. Sin ellos, no puedes empezar el proceso de producción.
A su vez, los proveedores de bienes terminados y de materias primas se clasifican por su modelo de negocios, es decir, si ofrecen sus productos por mayoreo o no. Si tu empresa necesita de un recurso específico de manera constante o en grandes cantidades, es recomendable que elijas a un proveedor mayorista sobre uno que no brinde esta ventaja.
Tipos de proveedores por ubicación y cómo gestionarlos
Los proveedores también pueden clasificarse por la ubicación geográfica en la que se encuentran. Existen 3 categorías principales:
- Proveedores locales: suelen ser los más convenientes, ya que operan en tu misma área e involucran menos gastos en transporte y menos trámites burocráticos.
- Proveedores nacionales o regionales: operan en tu misma región o país, pero suelen estar más alejados. Contratarlos implica conocer los procedimientos legales para transportar en tu país y, posiblemente, involucre mayores gastos de envío o transporte.
- Proveedores internacionales: operan en un país diferente al tuyo, por lo que tienes que considerar el pago de aduanas, permisos de importación y plataformas que te ayuden con el pago a proveedores en el extranjero. Sin embargo, suelen ofrecer productos únicos o difíciles de conseguir.
Es recomendable que, antes de decidirte por un proveedor, comprendas todos los procesos legales y fiscales de tu región, con el fin de evitar multas y sanciones. Igualmente, es importante que analices las necesidades de tu empresa y que evalúes las ventajas y desventajas de cada tipo de proveedor. Por ejemplo, puedes preguntarte si el costo reducido de contratar un proveedor local con productos de menor calidad te traerá más beneficios a largo plazo que contratar un proveedor internacional que te abra paso al mercado internacional, con mejores materiales o mano de obra más económica. Puedes tomar esta y otras decisiones de inversión calculando el costo de oportunidad.
Para gestionar eficientemente proveedores internacionales y maximizar los beneficios de trabajar con ellos, las empresas pueden aprovechar las soluciones que ofrece Xepelin. De esta forma podrán realizar pagos a proveedores en cualquier parte del mundo de manera rápida y 100% digital, con la opción de financiamiento. Esto no solo simplifica los procesos de pago eliminando la necesidad de trámites complicados y uso de intermediarios financieros, sino que también ayuda a mejorar la liquidez de la empresa, permitiendo que los recursos se utilicen de manera más eficaz en otras áreas del negocio.
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Proveedores según el tipo de producto
Los proveedores también pueden clasificarse por el tipo de producto que ofrecen o la función estratégica de este en tu proceso de producción. Se pueden catalogar en 3 grupos:
- Proveedores secundarios o de apoyo: se refiere a aquellos proveedores que suministran productos de bajo valor o fáciles de conseguir, por lo que son fácilmente reemplazables.
- Proveedores principales: son proveedores que brindan materias clave para el desarrollo de tu producto que además determinan gran parte de su valor. Dado que estos son más costosos, tienes que analizar la demanda de tu producto antes de comprar con ellos grandes cantidades de mercancía.
- Proveedores de productos específicos: también se les denomina proveedores de productos “cuello de botella”. Son aquellos que ofrecen productos difíciles de conseguir, por lo que es recomendable hacer un mayor esfuerzo en mantener una buena relación con ellos.
Si bien es recomendable mantener una buena relación con todo tipo de proveedores, los proveedores principales o de productos específicos tienen un gran valor para tu negocio, por lo que tendrás que tener cuidado especial con su gestión.
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Tipos de proveedores según temporalidad
Por último, los proveedores se pueden definir por su temporalidad, es decir, la frecuencia con la que interactúan con tu empresa. Existen 2 categorías:
- Proveedores regulares: son aquellos que suministran artículos y productos a tu empresa de forma constante. Gracias a ellos, tu empresa puede llevar a cabo todas sus actividades regulares de administración y producción.
- Proveedores esporádicos: son los proveedores que brindan productos o servicios que no necesitas frecuentemente. Sin embargo, son tan importantes como los regulares, ya que son necesarios para lidiar con imprevistos o problemas específicos.
¿Cómo mantener una buena relación con mis proveedores?
Una buena gestión de la relación con tus proveedores implica enfocarse en 3 aspectos principales: una comunicación constante, la realización oportuna de pagos y buscar la forma de ayudarlos a crecer.
Mantener una buena comunicación con tus proveedores consiste en mantenerte en contacto con ellos y compartir información como tus planes a corto, mediano y largo plazo. Esto fortalece la cadena de producción al permitirles planear con antelación el inventario necesario y proyecta una imagen positiva de trabajar con tu empresa.
La segunda cuestión es extremadamente importante, ya que los pagos atrasados afectan tu reputación y deterioran la relación con tus proveedores, lo cual pone en peligro tu proceso de producción y el crecimiento de tu empresa. Para evitar esto, puedes implementar soluciones como la automatización de pagos o el pago oportuno con financiamiento. Esta última opción consiste en pagar a tus proveedores utilizando financiamiento externo siempre que lo necesites, pagando después con tu propio capital. De esta forma, mejoras la gestión de tus finanzas al tener el control total de la forma y el momento en el que utilizas tus recursos.
El último punto consiste en ver a tus proveedores como socios de negocios y, por ende, pensar constantemente en las formas en las que puedes apoyarlos. Puedes hacer esto al hablar bien de ellos con otros de tus aliados estratégicos y así mejorar su reputación o también puedes brindarles acceso a plataformas de financiamiento empresarial que les permiten cobrar sus facturas de forma anticipada. Esto posiciona a tu empresa como un gran aliado para cualquier compañía y solidifica las relaciones con tus proveedores actuales.
Mantener una buena relación con tus proveedores es una acción vital para lograr el éxito de tu empresa, pero, primero, es necesario conocer las características de cada uno para saber cómo gestionarlos de la mejor manera. Antes de tomar cualquier decisión relacionada con ellos, tienes que analizar las necesidades de tu empresa y luego determinar qué tipos de proveedores son claves para tu negocio, cuáles requieren un mayor cuidado al momento de manejarlos. Así, podrás encontrar el aliado que mejor se adapte a tu plan de crecimiento y tu estrategia de negocios.
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